¿Cómo se clasifican las cajas fuertes?

A la hora de comprar una caja fuerte para el hogar, apreciando los mecanismos de cierre, la forma, el tamaño y la seguridad, puede haber mucho que considerar.

Por suerte, la existencia de clasificaciones de cajas fuertes ayuda mucho a la hora de tomar estas decisiones.

Las cajas fuertes fabricadas por marcas de renombre reciben una clasificación o «calificación de caja» para proporcionar una escala comparable de lo fuerte que es su protección.

Para entender cómo funcionan, es importante conocer el objetivo principal de una caja fuerte moderna: ganar tiempo contra un ataque, ya sea por incendio o por robo. Ninguna caja fuerte es completamente a prueba de ladrones si el delincuente tiene el tiempo suficiente y las herramientas adecuadas.

Por lo tanto, una caja fuerte no es una garantía de protección, sino una medida de seguridad que dificulta y hace perder el tiempo a un ladrón para que entre en ella. Este tiempo permite la intervención de la policía o la huida de los ladrones.

Las cajas fuertes reciben estas clasificaciones mediante pruebas. Una caja fuerte con una clasificación reconocida ha sido sometida a ataques de acuerdo con las normas europeas de pruebas de ataque. Esto significa que, en condiciones de laboratorio, la caja fuerte ha sido atacada con una lista determinada de herramientas por un profesional que sabe cómo utilizarlas, reproduciendo el tiempo que necesitaría un ladrón para entrar.

Para cumplir las normas vigentes, las cajas fuertes tienen que someterse a estas pruebas donde han sido atacadas con una lista de herramientas y se registra el tiempo que se tarda en acceder al contenido, para luego otorga la puntuación correspondiente en función de las herramientas utilizadas y el tiempo empleado.

¿Cómo debe instalarse una caja fuerte?

Antes de elegir una caja fuerte, el comprador potencial debe considerar los aspectos prácticos de la instalación:

• ¿Sería mejor una caja fuerte de suelo que una de pared, teniendo en cuenta la distribución de la casa?
• ¿Existe una parte adecuada de la estructura de la casa que pueda soportar el peso?

Estas preguntas son importantes por dos razones: en primer lugar, afectan a tu decisión de compra y, en segundo lugar, la correcta instalación de una caja fuerte depende del cumplimiento de ciertas normas.

En caso de duda, la mejor manera de responder a estas preguntas es recurriendo a profesionales del sector.

No respetar las normas oficiales a la hora de instalar una caja fuerte en el hogar puede crear graves problemas, empezando por la vulnerabilidad. Al fin y al cabo, una caja fuerte es tan segura como sus accesorios.

Algunas cajas fuertes económicas pueden verse afectadas por el vuelco y el impacto, un proceso conocido como «rebote de la caja fuerte«. Las cajas fuertes pequeñas pueden ser arrancadas de sus herrajes y robadas en su totalidad, para ser abiertas más tarde a voluntad de los ladrones.

Las cajas fuertes probadas de fabricantes de renombre vendrán con pernos de fijación específicos, suministrados por el fabricante. Es muy importante utilizar sólo estos pernos, que han sido probados junto con el resto de la caja fuerte, por lo que se ha demostrado que funcionan. Además, las cajas fuertes deben ser instaladas por un profesional. Invertir en una caja fuerte costosa para que se rompa o se dañe en un incendio porque se haya soltado de sus fijaciones sería terrible.

Los buenos proveedores de cajas fuertes se encargarán de ello o, al menos, te proporcionarán un instalador externo. Incluso dejando de lado la seguridad, las cajas fuertes suelen ser pesadas, por lo que colocar una caja fuerte de pared (por ejemplo) puede ser un trabajo potencialmente peligroso.